Cuando era más joven e ingenuo pensaba que el orígen de todos los males se encontraba en la religión y la política. Sí, años después sigo pensando igual, pero no como orígen, sino como vehículo. Me explicaré: adornado con la ignorancia que me corona he decidido que es la superpoblación lo que nos obliga a luchar por el territorio y por los recursos naturales (y la supremacía moral para otros), y estas luchas se escudan en motivos políticos y/o religiosos.
Hacía tiempo que escuché esto de la teoría del extincionismo, así que investigué un poco de qué se trata, y habiéndome documetado he podido por un lado satisfacer mi curiosidad y por otro modificar esta teoría a mi gusto, descartando algunos puntos y modificando otros...
Básicamente lo que dice es que la humanidad debería tener una larga vida... y desaparecer. Para llevar esto a cabo lo único que se debería hacer es no traer más vida a este mundo... no tener hijos. En este punto primordial que puede parecer exagerado y radical existen muchos matices que no explicaré, para ello pueden documentarse ampliamente en la página del V.H.E.M.T(Voluntary Human Extinction Movement), donde todo es expuesto de manera clara y abierta.
Tener hijos forma parte de la evolución natural en todas las especies, pero al contrario que los demás seres, el hombre ha conseguido escapar (hasta ahora) de la selección natural que mantiene el perfecto equilibrio entre las especies y su entorno. Con ello nos hemos propagado como un virus causando los males que todos conocemos y algunos niegan (eliminación de especies, desertización, cambio climático...). ¿Cuántos deshechos genera anualmente cada humano? ¿Cuántos recursos consume? ¿Cuánto espacio ocupa?
Mi opinión sobre esta utopía no es tan contundente; usando las matemáticas al final el resultado es el mismo. Supongamos que la humanidad está compuesta por doce personas, 6 hombres y 6 mujeres (para faciliar las cosas). Teniendo en cuenta que para reproducirse se necesita un ser de cada género, tendremos 6 parejas, cada una de las cuales tendrá un/a hijo/a. Si todo sigue su curso cuando los progenitores mueran tendremos que la siguiente generación está representada por la mitad de la población anterior, es decir: la humanidad estará compuesta por 6 personas... De esta manera cada generación será en número la mitad que la anterior. Lo mejor es que todos tendríamos oportunidad de procrear con la certeza de que estamos haciendo algo bueno (o almenos no hacemos nada malo) por el planeta.
Repito que esto es un movimiento utópico con seguidores, simpatizantes y detractores. La reflexión final es que hoy en día tiene hijos quien puede, no quien quiere, y que es responsabilidad nuestra garantizarles un nivel de vida digno a corto y largo plazo. No solo de reciclar vive el hombre...